¡Carajo con los gringos! Los EEUU acusan a China de prácticas comerciales injustas, de manipulación monetaria y de piratería intelectual

inSurGente 22 Feb. - ¡Con la vieja historia de Occidente en sus relaciones con China! ¡O la de los EEUU con el Japón!

¡Y que decir de la política de las cañoneras, la imposición de la moneda, el apropiamiento de las aduanas, en los países de Centroamérica y el Caribe!

¡Y la más reciente historia de la imposición de políticas neoliberales de apertura de fronteras y de ajuste económico, para manipular y multiplicar la deuda y apropiarse de los restos del patrimonio de los pueblos de América Latina!

¡Y qué decir de la imposición del dólar como moneda de intercambio después de la Segunda Guerra Mundial! Los yanquis quieren abrir a la fuerza el gran mercado chino y a la vez obligar a Pekin a que devalúe su moneda para impedir la enorme circulación de mercancías hacia el hiperconsumista mercado estadounidense.

Washington acaba de decidir endurecer su política comercial con China y estudia posibles demandas contra la manipulación del yuan. En los documentos del Pentágono, China es un rival económico que hay que convertir en una amenaza militar.


Prensa Latina.- El gobierno estadounidense decidió hoy endurecer su política comercial con China, a raíz del enorme déficit norteamericano, y estudia demandas y acusaciones contra el gigante país asiático, como la de manipulación del yuán.

Rob Portman, secretario de comercio de Estados Unidos, anunció la creación de una comisión para enfrentar la competencia china y censuró a Beijing por piratería intelectual y prácticas comerciales injustas.

Si esa situación continúa, advirtió, el gobierno de Estados Unidos podrá presentar demandas contra China ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Según datos oficiales de Washington, una cuarta parte del déficit comercial estadounidense, con récord ascendente en 2005 a 726.000 millones de dólares, 202.000 provienen del intercambio con China.

Esa cifra causó numerosas protestas en el Congreso, con la consiguiente acusación al presidente George W. Bush por parte de los legisladores, de inacción para frenar la pérdida de casi tres millones de empleos en el sector industrial desde mediados del 2000.

Incluso varios legisladores introdujeron proyectos de ley para castigar a China con sanciones económicas.

Con la intención de interceptar esos recursos, el gobierno divulgó la semana pasada su propia estrategia para lidiar con Beijing, en un documento de 29 páginas donde se propone un examen de las relaciones comerciales entre ambas potencias.

Fabricantes estadounidenses han acusado al gobierno chino de manipular el yuán y mantenerlo a un precio 40 por ciento inferior a su verdadero valor.

Indican al respecto que eso hace a los productos chinos muy baratos en el mercado norteamericano, y en cambio las mercancías estadounidenses resultan muy costosas en la nación asiática.