Washington, 16 Feb. ABN.- El Gobierno del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, es el responsable de la violencia en Haití por apoyar el fraude en las elecciones en ese país.
La denuncia la hizo la representante demócrata estadounidense Maxine Waters en declaraciones a la prensa en Washington, este miércoles, en las cuales criticó el intento de privar del triunfo electoral al ex primer ministro René Préval, lo que consideró una maniobra de la Casa Blanca.
Prensa Latina refirió que Waters subrayó que Bush debiera aceptar su responsabilidad por la violencia, el caos y los evidentes intentos de robarse estas elecciones.
La parlamentaria llamó la atención sobre la abrumadora ventaja de que disfrutaba Préval, al iniciarse el conteo de los votos, para que luego desapareciera de manera sospechosa.
Aseguró que se trató de una maniobra para impedir su triunfo y forzar una segunda vuelta que favorezca a un candidato más aceptable para las autoridades estadounidenses.
“Nadie podría creer que la ventaja de René Preval se haya desplomado tan rápido abajo de 50% requerido para evitar una nueva elección', precisó la congresista en un comunicado.
Las declaraciones de la legisladora californiana coinciden con denuncias de hallazgos de miles de boletas abandonadas en un basurero, lo que incrementa las sospechas de fraude.
“Estoy totalmente asqueada con mi propio Gobierno y el papel que ha jugado en este fiasco”, expresó la legisladora.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario