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En el día de ayer 20 de febrero, a las 10 de la mañana las comunidades indígenas wayúu enviaron una nutrida comisión a la estación Sierra Azul ubicada en la Sierra de Perijá, a la altura del río Socuy, para exigirle al personal de la empresa SEGEAMCA el desalojo de esas instalaciones ubicadas en territorio wayúu, ya que no es bien visto por las comunidades el trabajo de inventario forestal realizado por esta empresa para Corpozulia, en los predios de la denominada “concesión minera del Socuy”.
La comisión llegó hasta la estación y consiguió a 3 obreros contratados eventuales de SEGEAMCA: Johel González, Edwin Devis y Ricardo Devis; a cargo del responsable de cuadrilla: Inmer Sepúlveda, al preguntarles por el técnico responsable de la empresa para la operación estos les mostraron el carnet de la empresa a nombre de la Ingeniera Forestal Nersy Marlene Garrillo, bajo el cargo de gerente general de la empresa.
Se les conminó a cesar las actividades, de inventario de árboles que venían realizando y a abandonar la zona, ya que las comunidades habían decidido no permitir esta operación por que consolida la violación de sus derechos ancestrales, como pueblo wayúu y de los derechos consagrados en la Constitución Bolivariana y en la Ley de Demarcación de tierras indígenas.
Los obreros aclararon a la comisión comunal, que ellos solo eran contratados y obedecían ordenes y pidieron pernoctar en la estación, lo cual se les permitió por ser de casta wayúu, los obreros anunciaron que la ingeniera responsable, llegaría el día siguiente y a esta se le anuncia a través de los medios de comunicación presentes (VIVE y medios alternativos), que no hay márgenes de negociación posibles y que su actividad en la Sierra de Perijá-Socuy debe cesar de inmediato, y que cualquier uso de la fuerza pública será tomada como una agresión directa a la humanidad de las comunidades indígenas que tiene allí sus predios.
Se determinó que con varios días de trabajo los obreros habían marcado los árboles más frondosos, de lo que para nuestros corresponsales es un paraíso de una indescriptible belleza.
La comisión indígena del Socuy, compuesta de mujeres y hombres wayúu declara que no es con la empresa SEGEAMCA, ni con Corpozulia que habrá diálogo, al considerarlos piezas de una conspiración trasnacional, sino sólo con el propio Presidente de la República, Hugo Chávez que tiene en sus manos un informe del Ministerio del Ambiente, ordenado por el, que le indica la inconveniencia de ampliar las minas en esa tierra indígena, por el agua y los derechos ancestrales que se sacrificarían en este negocio, además de la suma de intereses antisoberanos conjugados en este plan.
Las comunidades indígenas esperan ser escuchadas directamente por Chávez o enfrentaran cuerpo a cuerpo cualquier intento de violación de su territorio. La consigna colocada en las piedras de los ríos, con un spray de pintura incautado a SEGEAMCA, dice así: tierra, agua y dignidad, No al carbón.
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