Paris 01 Mar. - Una disfunción grave en la estructura política y económica del gobierno palestino desencadenaría un "caos social" en los territorios, advirtió el miércoles el ministro de Relaciones Exteriores francés, Philippe Douste-Blazy, a su homóloga israelí, Tzipi Livni.
"Un desmoronamiento brutal de la administración y de la economía palestinas no beneficiaría a nadie, desembocaría en un caos social, económico y de la seguridad, con una reanudación de los actos de violencia", declaró Douste-Blazy antes de una cena de trabajo con Livni.
El canciller francés instó a Israel a prestar su apoyo al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abas, y consideró peligroso retirar toda la ayuda financiera a los palestinos "al menos hasta que se instaure el nuevo gobierno" del movimiento radical Hamas, ganador de las últimas elecciones.
Por su parte, Livni, que proseguía en París una visita de dos días por la Unión Europea que la llevó ya a Viena y Londres, ha respondido que su país no quiere perjudicar a la población civil palestina pero "cuando una organización islámica llama a destruir Israel, se tiene que defender".
Y añadió que "nadie debería mantener contactos con Hamas antes de que acepte las condiciones" de la comunidad internacional, es decir, la renuncia a la violencia y el reconocimiento de Israel y de los tratados de paz.
La Autoridad Nacional Palestina se enfrenta a una grave crisis financiera que se agravó con la reciente decisión de Israel de suspender la transferencia de fondos que le debe por el cobro de derechos de aduanas y del impuesto sobre el valor añadido (IVA).
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