La Paz, 22 dic (PL) El líder indígena boliviano Evo Morales entró hoy a paso de vencedores al palacio de gobierno, como presidente electo, tras advertir a sus seguidores que no piensen en cargos sino en servir al pueblo.
Votación de Morales sigue aumentando: 54 por ciento
Presidente electo y saliente tratan hoy transición boliviana
Morales, que muchas veces visitó el Palacio Quemado como líder opositor, llegó puntual a la cita con el presidente saliente, Eduardo Rodríguez, para coordinar el tránsito a la nueva administración.
El presidente electo ingresó a la sede con su conocida tenida informal y flanqueado por dirigentes políticos, técnicos calificados y dirigentes populares que integran las comisiones para el traspaso de poderes.
Esos grupos de trabajo fueron designados ayer en una asamblea del Movimiento al Socialismo (MAS) y las organizaciones sociales que apoyan a Morales, cita que determinó una fisonomía similar para el gabinete ministerial que designará el próximo gobernante.
Tras casi dos horas de reunión, compareció brevemente ante la prensa junto al delegado presidencial para Asuntos Políticos, Jorge Lazarte, y coincidieron en que el trabajo de la transición comenzó de inmediato.
Para el efecto, Morales acreditó como sus representantes al periodista Alex Contreras (protocolo), al economista Carlos Villegas y al dirigente del aliado Movimiento sin Miedo (MSM) Fabián Yaksic (economía).
También al mayor retirado Juan Ramón Quintana y al dirigente indígena David Choquehuanca (política) y la dirigente profesional Celinda Sosa y al experto en educación Noel Aguirre (temas sociales).
Dijo haber pedido inicialmente la lista de invitados extranjeros, para incluir a personalidades internacionales que apoyan las luchas sociales por el cambio y destacó, en ese terreno, las funciones que cumplirá Contreras.
A esa labor del periodista se sumará la de adaptar el protocolo a la histórica toma de posesión del primer presidente indígena de la historia, la cual tendrá dos versiones, una en el congreso, como es habitual, y otra en las calles y con los rituales indígenas.
Morales adelantó la decisión de jurar también el cargo en la Plaza San Francisco, en el corazón de La Paz y escenario característico de grandes manifestaciones populares.
Refirió por otra parte que en la cita con Rodríguez se aclararon temas preocupantes, como el de la postergación del desenlace de la licitación internacional de la explotación del gran yacimiento de hierro de El Mutún, en el oriente del país.
Señaló haber dejado en claro que no pidió la suspensión, por 60 días, del proyecto, el cual debe continuar por su importancia para el país, para la inversión y para el desarrollo de la región oriental, mientras Lazarte ratificó el aplazamiento, que motiva protestas en esa parte del país.
También dijo haber acordado con Rodríguez que la llamada orden general de destinos (nombramientos militares) debe postergarse para que la defina la próxima administración.
Entre los lineamientos de su gobierno, el de mayor apoyo ciudadano en décadas, Morales adelantó en la asamblea de ayer a sus militantes que su gestión no servirá para distribuir cargos, "sino para cambiar el país".
Por ello, explicó, se necesita gente comprometida, decidida a trabajar y sacrificarse y advirtió que la gran votación lograda -54 por ciento, según cómputos parciales- no es "una carta blanca para hacer lo que cada uno quería (...) sino para servir al pueblo".
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