domingo, enero 29, 2006

Consejera asegura que niños trabajadores de América Latina están desprotegidos

Caracas, 28 Ene. ABN. (María Elena Monroy).- La mayoría de los millones de niños trabajadores de América Latina no cuentan con ningún tipo de protección, aseguró la consejera nacional de derechos del niño, niña y del adolescente, María Rodríguez.

Estas declaraciones fueron ofrecidas por Rodríguez en el encuentro latinoamericano de niños y adolescentes trabajadores que organizó el VI Foro Social Mundial en el auditorio del Liceo Andrés Bello de Caracas.

Aunque Rodríguez no indicó cifras oficiales, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés) reportó en 2005 que hay más de 246 millones de niños trabajadores en el mundo dedicados a diferentes oficios que, remunerados o no, perjudican su desarrollo físico, mental o emocional.

“El tema del trabajo infantil es sumamente delicado porque en Latinoamérica carecemos de cifras oficiales que clasifiquen, no sólo el tipo de trabajos que hacen los niños, sino también las edades de los menores”, dijo.

Acotó que debido a la pobreza de los países latinoamericanos, se hace muy probable que cada vez más, niños de muy corta edad se incorporen al mundo laboral y dejen de lado la educación.

Para Rodríguez el sistema capitalista es culpable de esta situación, pues promueve la explotación del hombre por el hombre, incluyendo a los más pequeños.

Según la especialista, los niños que trabajan en las minas de países como Perú o Bolivia son doblemente explotados si se les compara con las actividades que tienen que hacer los hombres.

Considera que es necesaria una revisión del concepto de trabajo infantil, debido a que en los países de América Latina el trabajo se concibe como un esfuerzo que hace el niño para ser remunerado y no como una actividad que lo dignifique.

Indicó que en Venezuela la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente (Lopna) permite el trabajo de niños y adolescentes de 14 a 18 años de edad con algunas condiciones, tales como un horario de 6 horas diarias.

El artículo 101 de dicha ley establece el derecho de los adolescentes a participar en las organizaciones sindicales, se les concede el derecho a huelga, a la seguridad social y se define la competencia de los Tribunales de Protección del Niño y del Adolescente para dirimir las controversias que puedan presentarse en materia laboral.

Sin embargo, Rodríguez acotó que la Lopna no contempla la protección del salario o remuneración que perciben los niños y adolescentes por sus trabajos.

A su juicio, el Estado debería velar porque los padres garanticen la inversión de ese dinero en beneficio del desarrollo de los más pequeños.

En esta actividad participaron más de 200 niños y adolescentes de diferentes países de la región.

Uno de ellos, Charly Jiménez, de 12 años de edad, indicó que trabaja en un mercado vendiendo sandalias confeccionadas por su madre.

El niño dijo que gana unos 10 mil bolívares diarios (unos 5 dólares) y que también se “rebusca” limpiando solares de los vecinos, oficio por el que percibe de 6 mil a 7 mil bolívares.

Charly es uno de los millones de niños que tienen que trabajar para llevar dinero a sus hogares.

Según el informe de Acción Humanitaria 2006, que fue elaborado por Unicef, Colombia y Haití son los países con la situación más difícil para los niños.

En Colombia el contexto es especialmente diferente al resto de Latinoamérica, debido al conflicto interno que durante casi 50 años ha generado violaciones a los derechos humanos.

Uno de los impactos del conflicto es el reclutamiento continuo de niños soldados por los grupos rebeldes armados.

Sobre Haití, el informe dice que los niños siguen viviendo en un ambiente caracterizado por problemas políticos, situación que reduce la asistencia social básica en la mayor parte del país.

No hay comentarios.: