Colombia y EEUU alcanzaron acuerdo sobre propiedad intelectual

Colombia y EEUU superaron hoy uno de los últimos obstáculos para lograr un Tratado de Libre Comercio (TLC) al alcanzar un acuerdo sobre el capítulo de propiedad intelectual, según informó el presidente Álvaro Uribe. "Lo de propiedad intelectual lo cerramos hace un rato", dijo el mandatario al salir de una reunión con la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice.

Las normas comunes de protección de los derechos de autor, las patentes y la propiedad intelectual en general han sido uno de los temas más conflictivos de las negociaciones del TLC entre ambos países, que comenzaron en mayo del 2004.
Al quitárselo del medio, el asunto de más peso que resta a los negociadores es la apertura del sector agropecuario a las importaciones del otro país.

El TLC debía cerrarse este viernes en Washington, pero Uribe no quiso aventurar si finalmente las conversaciones producirán un acuerdo en esta jornada. "Esperemos a ver", afirmó.

Tras la visita al Departamento de Estado, el mandatario colombiano se desplazó a la oficina del secretario de Agricultura de EEUU, Mike Johanns, en un intento de reducir la distancia en este tema para poder irse de Washington este sábado con un acuerdo.

Posteriormente participará en las negociaciones agrícolas que tienen lugar en la oficina del Representante de Comercio Exterior de EEUU, Robert Portman, con la esperanza de que su presencia ayude a resolver las últimas disputas.

Uribe se empeñó directamente en las discusiones sobre propiedad intelectual. Tras una sesión en la oficina de Portman con los negociadores, el mandatario logró que EEUU clarificase varios cabos sueltos.

Según informó el propio gobernante, Washington accedió a que el TLC diga que Colombia podrá tomar medidas "para proteger la salud pública", con lo que dejó entrever que podrá romper patentes de fármacos y fabricar genéricos en ciertos casos.

EEUU también señaló que Colombia protegía lo suficiente los datos de prueba de un medicamento de marca, explicó Uribe, por lo que no pedirá una extensión del período actual de cinco años durante los cuales no pueden venderse versiones genéricas, más baratas.