Caracas, 9 Mar. ABN.- El Ministerio de Comunicación e Información (MCI) emitió un comunicado en respuesta a la posición asumida por la organización internacional Reporteros Sin Fronteras en el caso del periodista Gustavo Azócar, en el estado Táchira, quien está siendo procesado por delitos comunes por un tribunal local.
El comunicado oficial protesta por el acto injerencista de la desprestigiada organización y señala que es un instrumento más de la política de agresión contra Venezuela desplegada por el Gobierno de Estados Unidos.
A continuación el texto completo de la comunicación:
«La detención del periodista Gustavo Azócar, acusado de delitos comunes de estafa y desvío de fondos públicos cometidos en el año 2000 en prejuicio de la Lotería del Táchira, alborotó a la jauría transnacional pagada por Bush para difamar al pueblo y al Gobierno democrático de Venezuela.
«La organización Reporteros sin Fronteras, financiada por los servicios de inteligencia estadounidenses, a través del National Endowment for Democracy (NED), ha manifestado su preocupación por este caso de justicia ordinaria. Con el concurso de la oposición golpista venezolana, sus empresas de comunicación y el presunto delincuente, pretenden convertirlo en un atentado contra la libertad de expresión.
«Reporteros sin Fronteras irrespeta a Venezuela, se entromete en nuestros asuntos internos y en las decisiones soberanas de los jueces, con la complicidad de la oposición golpista y las empresas de comunicación privadas, en una nueva ofensiva mediática que forma parte de las operaciones de guerra psicológica del Imperio para justificar su agresión contra nuestra democracia.
«Reporteros sin Fronteras nunca se interesó en los salarios miserables que las grandes empresas de comunicación pagan a sus empleados y obreros, ni en sus condiciones laborales, ni en la ausencia de una representación corporativa que defienda sus intereses, ni en la ausencia de elecciones en el Colegio Nacional de Periodistas durante tres períodos (6 años). Tampoco se interesó en los despidos masivos de periodistas y reporteros en diarios y televisoras.
«Al igual que el Gobierno Bush, sus servicios secretos, sus organizaciones de fachada y sus lacayos criollos, Reporteros sin Fronteras ha comenzado sus operaciones para el próximo sabotaje mediático contra la Revolución Bolivariana.
«El pueblo y el Gobierno Bolivariano lo saben y están listos para responder, en legítima defensa de la vida y de la Constitución».
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