martes, enero 24, 2006

Venezuela continúa presionando a EEUU para que extradite a terrorista Posada Carrilles

Enero 24, 2006.- El gobierno de Venezuela a través de su embajada en Washington DC, reiteró su exigencia al gobierno de EE.UU. de que proceda a la deportación del terrorista Luis Posada Carriles, quien se encuentra en tierras estadounidenses desde el año pasado.

"La Administración Bush está obligada a extraditar a Venezuela o a juzgar en Estados Unidos a Posada Carriles por los cargos de asesinato en primer grado," reza un comunicado de la embajada venezolana.

El gobierno de Venezuela reitera que ha cumplido con todos los pasos necesarios para la deportación del terrorista y le recuerda a EE.UU. que debe cumplir la ley al y hacer valer tratados como el Tratado de Extradición vigente entre Venezuela y EE.UU., la Convención para la Represión de Actos Ilícitos contra la Seguridad de la Aviación Civil firmada en Montreal, y el Convenio Internacional para la Represión de Ataques Terroristas.

"Una guerra contra el terrorismo no puede ser librada “a la carta”, seleccionando a cuál terrorista hay que juzgar y a cuál no. Terrorismo es terrorismo, y punto."

"Si otro país capturara a Osama bin Laden, ¿no exigieran las familias de las víctimas de los ataques del 11 de septiembre que el terrorista fuera juzgado por asesinato?"

A continuación se reproduce el comunicado de la Embajada:

EMBAJADA DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
WASHINGTON, D.C.

COMUNICADO DE PRENSA
24 de Enero, 2006

Luis Posada Carriles es un terrorista y un fugitivo de la justicia en Venezuela. Él es responsable por la voladura de un avión de pasajeros con 73 personas a bordo, incluyendo a una mujer embarazada, hecho perpetrado en octubre de 1976. Posada escapó de prisión en Caracas antes de que la Corte hubiese emitido un veredicto y tiene que ser extraditado a Venezuela para responder por los cargos en su contra por el asesinato en primer grado de 73 personas.

Cuando el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela supo que Posada Carriles estaba viviendo en Miami, introdujo la solicitud de detención preventiva con fines de extradición para asegurar que no escaparía nuevamente de la justicia. En vez de atender esta solicitud, cuatro días después, el 17 de mayo de 2005, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos lo detuvo por un delito de inmigración.

La Administración Bush no ha seguido el curso de la solicitud de extradición realizada por el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela, y ha escogido tratar el caso Posada como un simple trámite de inmigración. Es por esto, que ahora, este terrorista, el Osama bin Laden de Latinoamérica, está a punto de ser dejado libre.

Estados Unidos está obligado a cumplir los pasos requeridos para la solicitud de extradición de Venezuela a través de las Cortes Federales. El 9 de noviembre de 2005, el Departamento de Estado envió una nota diplomática a nuestra Embajada, informando que enviarían “pronto” “preguntas y preocupaciones” relacionadas con el caso.

Todavía no hemos recibido estas preguntas y preocupaciones, y ahora el terrorista está a punto de ser liberado.

La Administración Bush está obligada a extraditar a Venezuela o a juzgar en Estados Unidos a Posada Carriles por los cargos de asesinato en primer grado. La solicitud de extradición introducida por Venezuela se basa en tres específicos instrumentos legales:

1.El Tratado de Extradición vigente entre Venezuela y Estados Unidos; 2. La Convención para la Represión de Actos Ilícitos contra la Seguridad de la Aviación Civil firmada en Montreal, y 3. El Convenio Internacional para la Represión de Ataques Terroristas.

El Artículo 7 La Convención para la Represión de Actos Ilícitos contra la Seguridad de la Aviación Civil estipula categóricamente que “El Estado en cuyo territorio sea hallado el presunto delincuente, si no procede a la extradición del mismo, someterá el caso a sus autoridades competentes a efectos de enjuiciamiento, sin excepción alguna y con independencia de que el delito haya sido o no cometido en su territorio”. Estados Unidos no se está basando en la Ley. Debe extraditar o juzgar a Posada. Una vez más exigimos al gobierno de Estados Unidos cumplir con la Ley y presentar el caso en la Corte.

Una guerra contra el terrorismo no puede ser librada “a la carta”, seleccionando a cuál terrorista hay que juzgar y a cuál no. Terrorismo es terrorismo, y punto.

Si otro país capturara a Osama bin Laden, ¿no exigieran las familias de las víctimas de los ataques del 11 de septiembre que el terrorista fuera juzgado por asesinato? ¿Cómo se sentiría el pueblo norteamericano si los captores de Osama en vez de juzgarlo por sus crímenes, simplemente le tramitan un caso por un delito menor de inmigración?

No hay comentarios.: