El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas decidió no emitir una declaración de condena a los últimos hechos de violencia en Cisjordania y la Franja de Gaza luego de que un país árabe demandó que Israel libere a los prisioneros que capturó en la cárcel de Jericó
Qatar, miembro del Consejo, solicitó por pedido de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) que el máximo órgano de la ONU incluya la demanda de liberación de los prisioneros y una condena al ataque que llevaron a cabo fuerzas israelíes a la prisión palestina.
El martes, soldados israelíes asaltaron la cárcel de Jericó y se llevaron al líder palestino Ahmed Saadat y a varios de sus simpatizantes, momentos después de que los guardias estadounidenses y británicos abandonaron la custodia de la prisión por considerar que no se garantizaba su seguridad.
El negociador jefe palestino, Saieb Erekat, dijo hoy que se trató de un plan para destruir a la ANP. "Nos exigen que cumplamos los acuerdos y cuando Israel los rompe sin pudor, nadie dice nada", manifestó.
La ofensiva israelí desató una ola de ataques de militantes palestinos y de secuestros de trabajadores humanitarios extranjeros, quienes luego fueron liberados.
Después de que el Consejo de Seguridad decidió cajonear la declaración, el enviado palestino ante la ONU, Riyad Mansour, denunció que Gran Bretaña y Estados Unidos vetaron el texto. El documento ha estado bajo discusión durante los últimos tres días y estaba listo para ser difundido públicamente hasta que Qatar pidió una enmienda.
El embajador interino británico, Adam Thomson, negó la acusación hecha por Mansour. Thomson precisó que el texto iba a expresar "profunda preocupación" y a deplorar la violencia en Cisjordania y la Franja de Gaza tras el asalto de militares israelíes a la prisión de Jericó. El documento no instaba sin embargo a liberar a los prisioneros tomados por Israel.
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