En defensa del Zulia

El cuento venía rodando en forma de rumor y ayer El Nacional le dio carácter de noticia: un grupo de mamagüevos enfermos de "libre mercado" han anunciado que quieren hacer un plebiscito para proponerles a los zulianos su separación administrativa del resto de Venezuela, y declararse estado capitalista y neoliberal. Por anunciar cosas menos graves que esa, y aun sin que tuviéramos apoyo financiero internacional (como sí lo tienen estos payasos) hace diez años nos allanaban, nos llevaban presos, nos torturaban y nos asesinaban. Muchos muertos nos debe la derecha. Yo propongo que se aproveche esta ocasión, no para asesinar a nadie, sino para que esa cuerda de animales sientan aunque sea la amargura de una bofetada. Que Globovisión los convierta después en héroes, no importa. Pero hay que evitar que estos vergajos se aprovechen de la legítima pasión de los zulianos por su región para intentar un experimento separatista.
¿No lo creen posible? Pues asómense a la encuesta que realiza en este momento la página digital de El Nacional: cuando voté, hace unos minutos, había 518 votos registrados, de los cuales 43% estaba de acuerdo con la autonomía del estado Zulia. Cierto que 51% estaba en contra, pero es fácil imaginarse lo que ha de suceder en los próximos días. La campaña mediática será tan fuerte y asquerosa que el antichavismo en pleno comenzará a pensar y actuar como tradicionalmente lo hace: votará contra todo lo que le suene a chavismo, se opondrá a todo lo que diga Chávez. Así que, como desde esta acera comenzaremos a defender la integridad de Venezuela, del lado de allá entenderán que eso suena a comunismo y por lo tanto lo que conviene al país es la separación del Zulia. Si no fueran tan brutos ni tan pendejos valdría la pena sentarse con calma a explicarles el asunto.
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  Nunca he sido partidario de la acción represiva de los cuerpos policiales y de inteligencia. Remarco la palabra inteligencia porque la contradicción es obvia. Pero ustedes saben a qué me refiero.
  Desde que me conozco, yo y los míos, mi gente cercana, hemos entendido a la (s) policía (s) como una figura perversa que está del lado de allá echándonos plomo, gases o coñazos, y en consecuencia hay que tirarle lo mismo para allá cada vez que se pueda. Bastante nos jodieron cuando decirse revolucionario era un acto de suma gravedad y no la sabrosura oficial que es ahora, y bastante nos joden todavía, cuando se supone que el Estado está cambiando para favorecernos. Así que ni sueñen con que de un día para otro nos vamos a deshacer en aplausos hacia la PM o hacia cualquier mierda de uniforme (como no sean los peloteros de nuestro equipo), nomás porque ahora el jefe de ellos se llama Juan Barreto y no Antonio Ledezma.
  Gran introducción para aterrizar en esta pequeñísima conclusión: si en algún momento nos ha parecido necesario que la Disip, la Fuerza Armada y cuanto organismo de seguridad se active y empiece a repartir coscorrones, es este mismo. Allá en el Zulia tienen trabajo. Si los órganos regulares del Estado no quieren asumirlo así, no se preocupen. Sobra en estos cerros quien haga el trabajo.

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