viernes, febrero 10, 2006

Yuri Pimentel: “Los venezolanos estamos inmunizados contra las mentiras mediáticas”

“Los medios privados han logrado desprestigiarse tanto que ni la misma gente de la oposición les cree”. “La integración Latinoamericana ha permitido mostrar al mundo lo que realmente está ocurriendo en Venezuela” fueron algunas de las aseveraciones que hizo el ministro de Comunicación e Información durante la entrevista.

Durante el programa Diálogo Abierto, transmitido la noche de este jueves por Venezolana de Televivisón (VTV), el Ministro Yuri Pimentel, aseguró que la guerra mediática de las televisoras, emisoras de radios y periódicos de circulación nacional contra el Estado venezolano es una guerra de todos los días, donde hay que tratar de dar la mejor respuesta posible para desmentirlos una y otra vez.

Argumentó que el Ministerio de Comunicación e Información se ha estado pronunciando a través de comunicados en el que responde asertivamente a cada una de estas ofensivas. Sin embargo, dijo que “internacionalmente hay que tener más cuidado porque (esas mentiras) pueden llevar al engaño de muchos pueblos en el mundo”.

Calificó a las recientes declaraciones del directivo de Radio Caracas Televisión, Marcel Granier, como acto de caricaturas al decir que en Venezuela ya no hay libertad de expresión, incluso aseguró que en la programación de RCTV se transmiten mensajes insultantes para la figura del presidente Chávez y para la revolución. “Esa es una forma de demostrar que lo que dice Marcel Granier es mentira”, dijo el titular de la cartera de comunicación.

Particularmente, Pimentel opina que el grado de popularidad del presidente Hugo Chávez ahora es mucho más alto en estos momentos, en comparación a los indicadores que reportaron los años anteriores de su gobierno.

A propósito del anuncio hecho por el gobierno de los Estados Unidos sobre aumentar el presupuesto para los programas que la Voz de América transmite hacia Venezuela, Pimentel recordó que el Ministerio de Comunicación e Información se pronunció señalando que se trata de una competencia desleal, pero que en todo caso no son más que “bravuconadas” de la administración del presidente norteamericano George W. Bush.

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