lunes, diciembre 19, 2005

Legado de Bolívar sigue vivo en Santa Marta

Prensa Presidencial (17.12.2005) Santa Marta, Colombia. Al consultar la opinión de cualquier ciudadano que transita por las calles de Santa Marta (capital del departamento de Magdalena, Colombia) es fácil sorprenderse de cómo recuerdan a la persona que dio su vida por consolidar la independencia de su país del yugo español. Una población despierta y llena de los ideales bolivarianos es la característica principal de cada uno de los habitantes de esta histórica ciudad de la costa colombiana.

Los casos son múltiples y poseen sus nombres. Cecilia Mejías, colombiana de 56 años, refirió que “Simón Bolívar hizo mucho por nuestra libertad pero, advirtió, parece que en nuestra sociedad todavía hay rezago de aquella independencia que tuvimos”.

Firme y clara en sus ideas, asegura que aún no se ha consolidado completamente la unidad en el continente, pero apuesta que con la voluntad de los gobiernos, la ciudadanía y los jóvenes, este sueño bolivariano podría convertirse en una realidad palpable.

Cecilia no fue la única persona en atinar en esta percepción. En su mayoría, los samarios tienen una visión sobre el legado y los pensamientos, a veces catalogados de “futuristas” debido a su vigencia en la actualidad.

A 175 años de la desaparición física del Libertador, aún es fácil apreciar en Santa Marta vestigios de lo que fue la presencia de este gran hombre en territorio costeño. Específicamente, en la quinta San Pedro Alejandrino (última morada de Bolívar) puede notarse la presencia del mismo Bolívar en cada rasgo de la casa que le dio residencia antes de partir.

Lejos de hacer una crónica inverosímil de esta instalación de corte colonial, importante es destacar que en sus paredes aún se conserva gran parte de la historia que recoge los años de lucha y entrega que este ilustre venezolano y ciudadano del mundo, brindó en busca de la unidad americana, sueño utópico que planteó Bolívar en su batalla independentista, en proceso de consolidación en la actualidad, para el bien de los pueblos.

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