Morales promete continuar lucha de Che Guevara

La lucha del Che Guevara la vamos cumplir, dijo el presidente electo

Foto: Agencias

Tiwanaku, Bolivia, 21 ene (PL) El presidente electo de Bolivia se comprometió hoy aquí ante la grandeza de sus antepasados y los pueblos indígenas, a continuar la lucha de Che Guevara y el rebelde Túpac Katari, y a acabar con el neoliberalismo.

El líder indígena asumió esos compromisos entre las pétreas ruinas de Tiwanaku, a 80 kilómetros al oeste de La Paz, y ante una espontánea y multidinaria concentración popular, tras recibir los símbolos originarios de mando, como máxima autoridad andina.

Esta lucha no termina, en el mundo gobiernan los ricos o gobiernan los pobres, manifestó Morales, tras saludar con el puño en alto a los asistentes, indígenas y gentes de las ciudades, llegados de toda Bolivia y países vecinos.

Aquí sigue la lucha de Túpac Katari -rebelde anticolonalista indígena del siglo XVIII- y la lucha del (Comandante Ernesto) Che Guevara la vamos cumplir, dijo el presidente electo, en un discurso en el que delineó con nitidez sus posiciones de raigambre popular, indígena y latinoamericana.

En otro pasaje de su intervención, dijo que la concentración del capital en pocas manos no soluciona los problemas de la humanidad y de los pobres del mundo, por lo que se debe cambiar el modelo privatizador reinante.

Se declaró emocionado por la espontánea y masiva concurrencia, producto de la conciencia del pueblo, que le hizo recordar el acto de masas del Día Internacional de los Trabajadores al que asistió en La Habana en mayo de 2004.

Enfundado en una túnica roja y un colorido gorro indígenas, atuendo con el que recibió la investidura como "mallku" (líder máximo) de los pueblos indígenas, Morales dijo que hoy se inicia una era para los pueblos, un nuevo milenio de igualdad y justicia.

Hizo reiterados llamados a la unidad del pueblo, a la que llamó incluso a los dirigenes y ex dirigentes populares que no le son afines, para acabar con el sistema y el modelo neoliberal, objetivo con el que se comprometió ante las ruinas de la cultura Tiwanaku.

Dijo también que la unidad es necesaria para cambiar una historia de saqueo de los recursos naturales y de discrimninación, sometimiento, odio y desprecio contra los indígenas, para dar paso a la equidad, sin venganzas ni rencores.

También prometió ejercer un gobierno defensor de los pueblos indígenas de Bolivia y de América Latina y llamó a estos a trascender de la resistencia a la toma del poder para acabar con políticas que no han solucionado los problemas de los pueblos.

Pidió apoyo de sus compatriotas para poder cumplir el cometido serio y responsable de cumplir con el pueblo y "derrotar al imperio" y llamó a las autoridades originarias a ayudarlo y a controlar su desempeño.

Si no puedo avanzar, empújenme, corríjanme; podemos equivocarnos, pero nunca traicionar la lucha del pueblo boliviano ni la causa de la liberación de los pueblos de América Latina, manifestó.

Se refirió también a su victoria electoral y dijo que esta fue producto de la conciencia, que derrotó al poder económico y a las prebendas de sus rivales, conciencia que, aseguró, "va a cambiar nuestra historia".

Agradeció a las autoridades y sacerdotes originarios por los poderes y símbolos de mando entregados en un solemne ritual, y por darle la oportunidad de comprometerse ante los indígenas a gobernar correctamente para cambiar la situación económica del pueblo boliviano.